El cuidado correcto

Sugerencias de conservación

Las superficies de alta alidad de nuestras cocinas suelen ser muy fáciles de cuidar. Utilice siempre únicamente detergentes domésticos suaves e hidrosolubles, previstos expresamente en su información de producto para muebles de cocina. Utilice un paño suave y que no haga pelusa o una gamuza. No utilice nunca sustancias químicas agresivas ni agentes de limpieza o disolventes abrasivos. También los agentes abrasivos, estropajos de acero o rascadores para ollas destruyen la superficie en tal medida que ya no será posible su restauración. Por favor, ¡no utilice equipos de limpieza a vapor! ¡Los desinfectantes no son adecuados para muebles y superficies de cocina!

Elimine cualquier suciedad lo antes posible. Las manchas nuevas son mucho más fáciles de eliminar y se quitan casi siempre por completo. Séquese todo bien después de la limpieza pasando un paño.

Cualquier material utilizado en la cocina deberá estar expuesto a una temperatura y humedad ambientales óptimas. Asegúrese de que haya una ventilación adecuada cuando cocine y encienda siempre el extractor. El calor y el vapor elevados provocan a la larga daños por hinchamiento en los componentes de madera.

Superficies de melamina, polímero o estratificado mates

Los frentes laminados pueden limpiarse fácilmente con los detergentes convencionales de uso doméstico (no abrasivos). Disuélvanse los detergentes con agua y aplíquense mediante un paño limpio. Séquese todo bien después de la limpieza pasando un paño. Frotar demasiado fuerte las superficies mate, produce manchas brillantes.

¡Atención!
Ningún disolvente nitro o para resina sintética es apropiado para cuidar las superficies. Asimismo, el agente de limpieza no deberá estar coloreado, ya que los colorantes utilizados pueden dejar marcas.

Superficies satinadas mate

Utilice siempre únicamente detergentes domésticos suaves e hidrosolubles, previstos expresamente en su información de producto para muebles de cocina. Limpie cualquier suciedad lo antes posible y no deje, en ningún caso, que se reseque. Ante todo, las sustancias con una gran concentración de coloreantes (café, té, salsas, verduras, vino tinto) ya no podrán quitarse por completo una vez resecadas Para residuos de grasa resistentes y, posiblemente, resecados, utilice agua templada con una solución jabonosa de un 30 %. Con agentes agresivos o abrasivos, la superficie se pule, produciéndose una mancha de brillo visible.

¡Atención!
Ningún disolvente nitro o para resina sintética es apropiado para cuidar las superficies. Asimismo, el agente de limpieza no deberá estar coloreado, ya que los colorantes utilizados pueden dejar marcas.

Superficies brillantes/de alto brillo

Las superficies brillantes/de alto brillo se caracterizan por sus excelentes propiedades de limpieza. Para que las superficies no sufran desperfectos durante el proceso de fabricación en nuestra empresa así como durante el suministro, se recubren con una lámina de PE protectora. Dichas láminas no deberán retirarse antes de la última fase de montaje (antes de montar los tiradores). Una vez retirada la lámina, la superficie todavía es muy delicada y no alcanzará su grado de dureza definitivo hasta que no hayan pasado unos días (hasta una semana). Hasta que no haya endurecido, recomendamos presérvense las todavía delicadas superficies y evítense los efectos mecánicos. Esto también incluye intentos de limpieza más intensivos. Limpie las superficies únicamente con un paño suave, húmedo y limpio. Incluso las partículas pequeñísimas de suciedad en los paños provocan arañazos Séquese todo bien después de la limpieza pasando un paño.

¡Atención!
No utilizar agentes líquidos, alcohol ni disolventes para la limpieza No utilizar estropajos o similares.

Frentes de madera maciza y chapado de madera genuina

Al ser la madera un material vivo, no deberá ser expuesta a una atmósfera extremadamente húmeda o seca. La madera procesada ha sido adecuada a la humedad ambiental habitual de 45 a 70 %. Será, por tanto, sumamente importante conectar la campana extractora y ventilar bien la cocina mientras se haga la comida. Asegurar un suministro de aire/intercambio de aire/ventilación. La superficie del frente de madera ha sido sellada con un lacado especial que la hace fácil de cuidar.

No utilice nunca detergentes para la limpieza. Basta pasar una gamuza humedecida por el frente en el sentido de su textura.

Séquense todas las piezas bien con un paño suave en el sentido de la textura después de la limpieza. La exposición a la luz puede modificar las superficies de la madera. Para evitar variaciones de color, conviene exponer los frentes a una luz uniforme.

Frentes de cerámica

Las superficies de cerámica son de material natural al 100 %. Las superficies pueden variar ligeramente en cada proceso de cocción o con cada lote.

La superficie es muy fácil de cuidar y se puede limpiar con productos de limpieza de uso doméstico y un paño limpio. La grasa, el aceite y otros líquidos disponibles a la venta deberán eliminarse inmediatamente para que no dejen manchas permanentes. Pase, a continuación, un paño limpio con agua clara.

No se deberán utilizar limpiadores líquidos agresivos o abrasivos ni esponjas o limpiadores de vapor.

Frentes de pizarra

Debido a la superficie natural e irregular de la piedra, los frentes deberán limpiarse con un paño húmedo ejerciéndose poca presión. Esto evitará que las fibras del paño se queden enganchadas en la superficie de pizarra, pudiendo así arrancar pequeños trozos de la piedra. No se recomiendan los paños de microfibra. Utilice limpiadores solubles en agua para la limpieza; los limpiadores domésticos agresivos o sustancias abrasivas no son adecuados. Séquese todo bien después de la limpieza pasando un paño.

¡Atención!
El producto natural de la pizarra nunca deberá permanecer húmedo o incluso mojado durante mucho tiempo. Debido a la superficie porosa de la piedra, las salpicaduras de grasa y aceite deberían quitarse lo antes posible con agua caliente y lavavajillas.

Observe las instrucciones del fabricante para cualquier producto de limpieza en cuanto a su concentración.

Superficies de cristal

Normalmente, basta limpiar la superficie de cristal con agua templada y un poco de jabón neutro líquido. En caso de suciedad más resistente, así como de sustancias con contenido de grasa o aceite, utilice adicionalmente un limpiador de cristal convencional de uso doméstico. Lo más conveniente es un paño sin pelusa, una gamuza o una esponja suave. Adecuados para la limpieza son también los paños de microfibra. No es recomendable un paño de algodón. Séquese todo bien después de la limpieza pasando un paño.

Para las superficies satinadas no deberían utilizarse limpiadores con silicona o ácidos. Tampoco deberían utilizarse limpiadores muy coloreados.

Encimeras con superficie estratificada

La superficie no debería limpiarse nunca con agentes abrasivos. También el corte directo sobre la encimera así como deponer sobre ella ollas y sartenes calientes causa daños irreparables. Utilice por eso siempre tablas de cortar y posaollas. Utilice para la limpieza un paño suave, una gamuza, una esponja o paño de microfibra suave. Séquese todo bien después de la limpieza. En ningún caso utilice esponjas abrasivas, agentes abrasivos, estropajos de acero o rascadores para ollas, ya que destruyen la superficie en tal medida que ya no será posible una restauración.

Evite la humedad entre las juntas, en los cantos, así como en los encastres para placas de cocción y fregaderos. Espere unos 20 minutos antes de abrir el lavavajillas una vez terminado el programa, para que el vapor generado tenga tiempo a condensarse dentro del lavavajillas.

El movimiento de objetos con la cara inferior áspera (platillos, platos etc.) puede producir desperfectos visibles en las superficies de las encimeras.

Tiradores, tiradores corridos, pomos

Para disfrutar durante mucho tiempo de sus tiradores, le recomendamos seguir los siguientes consejos: no utilice agentes de limpieza ácidos ni abrasivos para cuidar y limpiar los tiradores. Productos de limpieza ácidos son, p. ej., los agentes de limpieza con vinagre, los agentes de limpieza con el efecto de los cítricos y descalcificadores. Limpiadores abrasivos son, por ejemplo, líquido abrasivo, abrillantadores de acero inoxidable y paños de microfibra. Estos agentes de limpieza provocan daños permantentes en la superficie y producen manchas que no pueden eliminarse y/o desperfectos en la superficie hasta incluso desprendimientos de la pintura. También los limpiadores a base de alcohol pueden dañar algunas superficies.

Limpie los tiradores solo con un paño suave y húmedo, en caso de suciedad grasa con agua tibia y jabón. Secándolo todo posteriormente con un paño suave y húmedo, evitará manchas de agua. ¡Evite también daños mecánicos causados por objetos duros como, p. ej., anillos, ollas, etc.!

Bisagras en puertas batientes, cajones y gavetas

Las bisagras en puertas abatibles, cajones y gavetas no requieren mantenimiento ni cuidados especiales.

Superficies de deslizamiento en armarios despenseros extraíbles

Los perfiles de rodadura son libres de mantenimiento y no requieren cuidado alguno particular. Nunca deberán engrasarse.

En caso que el armario no pueda abrirse con facilidad o no se pueda cerrar completamente, puede ser que exista suciedad en las superficies de deslizamiento, en las superficies de rodamiento o en las ruedas mismas. En cualquiera de estos casos no se debe usar nunca ningún lubricante como aceite, grasa o un rociador de silicona. Para eliminar la suciedad, basta con usar un paño seco y limpio para limpiar cuidadosamente todas las superficies de deslizamiento, las de rodamiento y las ruedas.

Fregaderos, griferías y placas de cocción

Los fregaderos están expuestos a una gran variedad de influencias en el uso diario. Cuidándolos diariamente, puede evitar que las superficies se vuelvan impresentables.

Utilice, para la conservación, un paño suave, una gamuza, una esponja, así como un detergente neutro de uso doméstico. Elimínese la suciedad más resistente y las manchas de agua con agentes de conservación de uso doméstico. Para eliminar el óxido atmosférico del acero fino, lo más adecuado es un limpiador abrillantador de metal de uso doméstico. Secar bien todas las piezas después de la limpieza.

¡Atención!
En ningún caso utilice: limpiadores ácidos (p. ej., detergentes cítricos/con vinagre), limpiadores con disolventes (p .ej., diluyentes), esponjas abrasivas, agentes abrasivos, estropajos de acero, rascadores para ollas, ya que destruyen la superficie en tal medida que ya no será posible su restauración. Con respecto a lo susodicho, tenga, por favor, también en cuenta las indicaciones de mantenimiento de cada fabricante particular.

Cuberteros

Para la conservación de cuberteros, utilice un paño suave, una gamuza, una esponja suave, así como un detergente neutro de uso doméstico. Para una limpieza más sencilla, los cuberteros también pueden sacarse de los cajones. Secar bien todas las piezas después de la limpieza.

En ningún caso utilice: limpiadores ácidos (p. ej., detergentes cítricos/con vinagre), limpiadores con disolventes (p .ej., diluyentes), esponjas abrasivas, agentes abrasivos, estropajos de acero, rascadores para ollas, ya que destruyen la superficie en tal medida que ya no será posible su restauración.

¡Atención!
Con respecto a lo susodicho, tenga, por favor, también en cuenta las indicaciones de mantenimiento de cada fabricante particular, ya que diversas piezas son aptas para lavavajillas.

Zonas de cocción

Elimine cualquier suciedad lo antes posible, ya que ésta, si no, se requema y se pega con el calor al volver a encender el quemador. Caso que la placa de cocción todavía estuviera caliente, utilice un rascador de vitrocerámica. Utilice, para la conservación, un paño suave, una gamuza, una esponja o un rascador de vitrocerámica, así como un detergente neutro de uso doméstico o detergente especial recomendado por el fabricante. La suciedad resistente causada por el agua, la cal o el desgaste de las ollas, podrá eliminarse con el detergente especial recomendado por el fabricante. En ningún caso utilice: esponjas abrasivas, agentes abrasivos, estropajos de acero o rascadores para ollas, ya que éstos destruyen la superficie en tal medida que ya no será posible una restauración.

¡Atención!
Con respecto a lo susodicho, tenga, por favor, también en cuenta las indicaciones de mantenimiento de cada fabricante de electrodomésticos particular. Estas indicaciones se entregan junto con los electrodomésticos.

Electrodomésticos
Cada electrodoméstico va acompañado de unas instrucciones de uso y mantenimiento particulares del fabricante. Aténgase, por favor, a las indicaciones descritas en estas instrucciones del fabricante.
Por favor, tenga también en cuenta los puntos "Consejos para el uso"..